Hace 130.000 años, vivía una niña neanderthal llamada Mara que tenía 10 años. Ella era una más de la tribu, que estaba compuesta por pequeños grupos. Como cada día salían a recolectar frutos, Mara siempre se alejaba del grupo y empezaba a observar el comportamiento de los animales. Un día como otro cual quiera ella se fue alejando poco a poco de su familia hasta perder de vista a su familia. La niña no se iba dando cuenta de que cada vez estaba más lejos, hasta que fue a encontrarse con otra tribu. La tribu empezó a oler a Mara como si de un animal se tratara, ella quedó sorprendida cuando vio una cosa que era una luz caliente.
La niña poco a poco se fue adaptando a aquel grupo, ya que le había cambiado toda su forma de alimentación, ya no pasaba frío y los animales se ahuyentaban con el fuego. A lo largo ella aprendió de los neardenthales y poco a poco se fue haciendo mayor.
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